
Aún ni siquiera te tengo y ya tengo miedo de perderte, amor.
Qué rápido se me ha clavado, qué dentro todo este dolor.
Es poco lo que te conozco y ya pongo todo el juego a tu favor.
No tengo miedo de apostarte, perderte sí me da pavor.
No me queda más refugio, que la fantasía. No me queda más
que hacer, que hacerte una poesía.
Porque te vi venir y no dudé, te vi llegar, y te abracé y puse
toda mi pasión para que te quedaras.
Y luego te besé y me arriesgué con la verdad,
te acaricié y al fin abrí mi corazón para que tú pasaras.
Mi amor te dí sin condición
para que te quedaras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario